La astrología viene acompañando al ser humano desde el comienzo de la cultura. Se basa en la interpretación del movimiento de los planetas y cómo estos afectan a la tierra y a nuestro propia energía.

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La carta natal en particular, es una foto del cielo en el momento en el que naces, cómo estaban ubicados los planetas alrededor de la Tierra. Se toma el momento del primer respiro como reflejo de la energía con la que venimos al mundo, y con la que vamos a mirar y relacionarnos con la vida.

 

Es una manera de reconocer las energías que conforman tu ser, con cuales te identificas y cuáles rechazas, y así integrar todo tu potencial. Es una puerta de autoconocimiento, de reconocer tus capacidades, patrones de conductas y el camino a tu propósito.